La escena indie de los videojuegos nos ha regalado joyas inolvidables, y Enter the Gungeon junto con su secuela Exit the Gungeon forman parte de ese legado. Desarrollados por Dodge Roll (con apoyo de Devolver Digital), ambos títulos ofrecen una experiencia frenética, caótica y cargada de humor, donde las balas son protagonistas y la rejugabilidad es el motor que impulsa al jugador a volver una y otra vez.
Enter the Gungeon: El nacimiento de una balacera infinita
Lanzado en 2016, Enter the Gungeon se convirtió rápidamente en un referente del género roguelike twin-stick shooter. Su premisa es sencilla pero ingeniosa: un grupo de aventureros desciende a la Gunjeon, una mazmorra llena de enemigos, trampas y jefes, con un objetivo peculiar: encontrar un arma mítica capaz de matar el pasado.
El juego destaca por:
- Jugabilidad frenética: esquivar balas es el corazón del combate, con un sistema de “rodar” que otorga invulnerabilidad momentánea y se vuelve vital para sobrevivir.
- Diseño de armas extravagantes: desde pistolas clásicas hasta rifles que disparan abejas, arcos de energía y referencias a la cultura pop gamer.
- Mazmorras generadas aleatoriamente: cada partida es única, lo que aumenta la dificultad y la rejugabilidad.
- Humor y estilo visual: su estética pixel art colorida y referencias constantes al mundo de las armas y videojuegos mantienen un tono ligero a pesar del caos.
Enter the Gungeon es desafiante, pero nunca injusto. Obliga al jugador a aprender patrones, dominar reflejos y aceptar que cada derrota es una lección más en el camino hacia el arma definitiva.
Exit the Gungeon: Un cierre diferente
En 2020, Exit the Gungeon llegó como secuela, pero con un giro inesperado. En lugar de repetir la fórmula del original, Dodge Roll decidió experimentar: ahora el objetivo es escapar de la Gunjeon, que se está desmoronando.
La diferencia clave está en la perspectiva y jugabilidad:
- Se pasa del estilo twin-stick shooter con exploración de mazmorras, a un plataformas tipo “bullet hell” en 2D.
- El jugador asciende en un elevador o escenarios dinámicos mientras se enfrenta a hordas de enemigos.
- Introduce el sistema de “arma cambiante”, donde el armamento rota constantemente, obligando a adaptarse a lo que se tenga en cada momento.
Aunque conserva el humor, la dificultad extrema y la creatividad en enemigos y jefes, Exit the Gungeon no tuvo el mismo impacto que su predecesor. Algunos jugadores lo consideraron más limitado en profundidad, al abandonar la exploración de mazmorras en favor de combates rápidos y directos. Sin embargo, sigue siendo un spin-off entretenido que expande el universo con frescura.
Dos juegos, una experiencia caótica
La saga en conjunto logra algo notable: ofrecer dos perspectivas distintas del mismo mundo. Enter the Gungeon brilla como un roguelike complejo, profundo y con cientos de horas de contenido, mientras que Exit the Gungeon apuesta por partidas más rápidas y un enfoque experimental.
- Si buscas un reto duradero, exploración y variedad, Enter the Gungeon es la elección perfecta.
- Si prefieres acción directa y caótica en ráfagas cortas, Exit the Gungeon puede ser tu alternativa.
Conclusión
Enter the Gungeon es un clásico moderno dentro del género indie, un título que todo amante de los shooters roguelike debería probar. Exit the Gungeon, aunque más discreto, funciona como epílogo divertido y complementario. Ambos demuestran el talento de Dodge Roll para combinar humor, dificultad y creatividad, convirtiendo las balas en algo más que proyectiles: en la esencia misma de la diversión.
