Quienes pueden consumir kombucha
Una de las bebidas más populares actualmente es la kombucha, que es un té azucarado que se expone a fermentación por una colonia microbiana gelatinosa. En la antigüedad a esta bebida se le conocía como “hongo de la inmortalidad”, sobre todo China, mientras que en Japón y Rusia se le llamaba como “hongo del té”.
Se considera que es procedente de Manchuria, en el extremo oriental de China, donde se mantiene como una bebida tradicional y ritual en algunas etnias de la zona. Dicho esto, a este té fermentado se le atribuyen una gran cantidad de beneficios para la salud. Uno de ellos es que equilibra la flora intestinal, debido a que es una bebida rica en probióticos.
Además, hay que sumarle el hecho de que es hidratante, por lo que podemos recurrir perfectamente a ella, evitando el consumo de bebidas industriales, que suelen tener una gran cantidad de azúcares y aditivos. Pero eso no es lo único, ya que actualmente se puede encontrar kombucha de diversos sabores del té, para ello se añaden frutas o zumos orgánicos. Esto hace que no nos resulte repetitiva y aburrida.
Por otro lado, es importante señalar que se trata de una bebida antioxidante que fortalece el sistema inmunitario. Esto se debe a que cuenta con polifenoles. Por lo que, si queremos sentirnos bien tanto por fuera como por dentro, consumir kombucha es una de las mejores opciones que tenemos. Obviamente, no se trata solo de tomar esta bebida, ya que también hay que combinarla con una alimentación sana y rica en frutas, verduras y legumbres.
Además, de esto contiene muy pocas calorías, son aproximadamente unas 30 calorías por 100 mililitros, por lo que está prácticamente ausente. Esto la convierte en una bebida ideal para refrescarnos y dejar un poco de lado los refrescos industriales. Te recordamos que puedes comprar kombucha Carrefour.
Otro de sus beneficios es que cuenta con propiedades estimulantes, esto quiere decir, que nos ayudará a mantenernos activos y enérgicos debido al contenido de cafeína que tiene. De igual forma consigue mejorar la concentración y la memoria.
Por otro lado, logra cuidar tu línea, debido a que ayuda a acelerar el metabolismo, y también ayuda a quemar calorías. Debido a esto es buena idea incluirla si queremos cuidar nuestro cuerpo y dieta. También es antibacteriana y fungicida, debido a que puede combatir especialmente el hongo Cándida y la bacteria E. coli.
Por otro lado, se dice que ayuda a prevenir la artritis, debido a que es una bebida con un alto nivel de glucosamina, una sustancia que ayuda a mantener las articulares saludables.
Ahora que sabes sobre todos los beneficios que tiene la kombucha es muy probable que te estés preguntando ¿Quiénes pueden consumir esta bebida? La respuesta es que la kombucha no tiene edad, por lo que no importa si tienes 10 o 70 años, igual puedes tomar esta bebida.
Lo mencionado no quiere decir, que no haya que tomar en cuenta algunos aspectos. Por ejemplo, si estás embarazada o eres lactante, es importante consultar con un especialista. No hay que olvidar que la kombucha no está pasteurizada, y, además, por la fermentación se pueden encontrar pequeñas tazas de alcohol en la bebida, aunque esta es inferior al 0.5%, recordemos que se considera una bebida sin alcohol.
Ahora en el caso de los niños, también puedes consultar con un profesional, sobre todo porque la kombucha es una bebida a base de té y aunque en el proceso de fermentación se reduce mucho la cantidad de teína esta sigue estando presente. Aunque no en grandes cantidades, solo sigue quedando en torno a 1/3 de la teína presente en el té.
Con respecto al azúcar, si eres una persona diabética, debes saber que a pesar de que en sus ingredientes se encuentra el azúcar, esta se usa para alimentar el SCOBY y no para endulzar la bebida.
La kombucha como tal es baja en azúcares y en calorías, de hecho, el azúcar se consume casi en su totalidad durante la fermentación. Por lo que la cantidad de azúcar residual que queda en la bebida es un 2-3%. Obviamente si tienes alguna duda siempre puedes consultar con tu médico para asegurarte que puedes tomarla.